El suelo absorbe y almacena el calor del sol año tras año, proveyéndonos de una fuente constante de energía renovable. A tan solo unos metros de profundidad hay una temperatura media bastante constante de 10ºC a 18ºC. Esta energía acumulada representa una reserva inmensa de calor fácil de aprovechar.
La bomba de calor geotérmica capta el calor del suelo a través de pozos perforados que alcanzan gran profundidad.
El calor se transfiere del suelo a la bomba de calor por medio de una solución de agua anticongelante ecológico que recorre un circuito cerrado, absorbiendo la energía térmica del suelo y llevándola hasta la bomba de calor.
Dentro de la bomba de calor hay otro circuito cerrado, en este caso lleno de refrigerante, que capta el calor geotérmico y lo transforma en calor a mayor temperatura que luego se distribuye al acumulador de agua caliente sanitaria (ACS) y al suelo radiante, sin duda el sistema más confortable, limpio, seguro y económico, recomendado por la Organización Mundial de la Salud, que por otro lado, puedes usar como suelo refrescante.
Con un sistema de geotermia, disfrutarás de una fuente de energía respetuosa con el medio ambiente, renovable y gratuita que reduce al mínimo las emisiones de CO2. Sin duda, la fuente de calor más eficiente en la actualidad.
Supondrá un antes y un después en tu calidad de vida.
La instalación de una bomba de calor geotérmica puede reducir el consumo de energía hasta un 80%. El motivo es que utiliza el calor del subsuelo, del suelo superficial o de un lago cercano como fuente de energía principal, y todos estos recursos son gratuitos.
Aunque la inversión en una bomba de calor no se recupera en un mes, apreciarás las ventajas económicas de forma inmediata, porque tus facturas de calefacción serán mucho menores.
Además, la eficiencia de la última generación de bombas de calor geotérmicas (con un rango de funcionamiento especialmente elevado) influye muy positivamente en el ritmo de amortización de la inversión.
Al almacenar y convertir la energía solar del suelo en calor y agua caliente para tu hogar, la bomba de calor geotérmica produce muchas menos emisiones de CO2 que cualquier sistema de calefacción convencional basado en el uso de combustibles fósiles. Es una fuente de calor muy respetuosa con el medio ambiente.
Cada año se construyen en Europa en torno a un millón de casas nuevas. Si todas instalaran bombas de calor, en un año estaríamos emitiendo unos 3.600.000 de toneladas de CO2 menos al año; el equivalente a retirar un millón de coches de las carreteras.
Una bomba de calor geotérmica hace que la calefacción sea un elemento “invisible”, al no necesitar regulaciones, ni encendidos, ni apagados; simplemente genera la temperatura que necesitas, de forma constante, a un bajo coste.
Si a esto añadimos un suelo radiante de alta gama (método más confortable, limpio, seguro y económico para transmitir la energía, recomendado por la Organización Mundial de la Salud), optimizaremos las condiciones higrotérmicas de tu vivienda.
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